Gaslight: This night will be a long night.
Dirigida por George Cukor y protagonizada por Charles Boyer, Ingrid Bergman, Joseph Cotten y Angela Lansbury.
Sinopsis
En la Inglaterra victoriana, una famosa cantante de ópera es asesinada. Su joven sobrina, que vivía con ella, es enviada a Italia, y el caso queda sin resolver. Allí estudia canto y se casa con el pianista acompañante de su profesor. Tras la luna de miel, la pareja se establece en la antigua casa de la cantante asesinada, donde la joven comienza a oír extraños e inexplicables ruidos mientras la luz de gas baja de intensidad.
En 1944 la historia dirá que dos grandes películas compitieron por llevarse el Oscar a mejor película aquel año y se fueron con las manos vacías. Aquel año en donde Double Indemnity de Billy Wilder y Gaslight de George Cukor se fueron sin llevarse la gloria, pero poseen el título de clásicos del cine con total autoridad.
Hoy toca reconocer a un thriller psicológico que nos brinda la icónica interpretación de Ingrid Bergman como Paula, la cual la llevo a ganarse su primer Oscar a mejor actriz para la sueca que brillo como nunca en la gran pantalla. Hablar de Gaslight inevitablemente nos lleva a la tremenda interpretación de Bergman en lo que supone una de las interpretaciones más abrumantes por parte de la actriz, que demuestra toda su capacidad para hacer volar su propia mente y reflejarnos el grado de locura e ingenuidad de una mirada espeluznante a la psicología humana.
Es también la película que demuestra que George Cuckor podía hacer un cine más complejo al cual se le encasillaba, demostrando que también podía ser versátil, dándonos quizás su película menos Cuckoreana, pero magistral al fin de cuentas. Lo que sí no cambiaría es su apelativo de "Director de actrices" donde volvería a llevar a grandes interpretaciones a su reparto, en especial a su lado femenino, como el descubrimiento de Angela Lansbury en su primer trabajo y su primera nominación a los premios Oscar como actriz secundaria, pero hay que ser justos con el director porque de igual manera logra sacar una brutal interpretación de Charles Boyer que suponía tener dos extremos diferentes en sus protagonistas y el gran George Cuckor logra hacer brillar a su pareja protagonista con categoría.
El resultado con que uno puede describir esta película es un inquietante relato de suspense resuelto en una puesta en escena que combina la elegancia formal con un notable sentido para la creación de atmósferas opresivas que te atrapa en tu asiento y de ahí no te hace salir hasta sus créditos finales. Una obra maestra que demuestra ser producida con el esplendor de las producciones MGM, en donde el trabajo de arte, de escenografía y de vestuario son impresionantes, lo que aumente el plus a una película que ya en su guion pese a lo sencillo que pueda resultar en propuesta es realizado con tanta inteligencia que sigue haciendo funcionar a una película luego de 80 años como la primera vez.
Quizás su lado teatral y sus expresivas interpretaciones te puedan hacer sentir que es otro cine y quizás sea así, pero es 1944 y el cine se definía de otra forma y ciertamente esa forma hace que tengamos una obra maestra que sigue perdurando en la filmoteca de los amantes del séptimo arte y con justa razón, ya que es un thriller psicológico de esos que cuesta encontrar en la actualidad, pero al cual no podrás decirle anticuado, porque creo que el personaje de Paula sigue existiendo lamentablemente en nuestra actualidad.
Calificación: ⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐
Crítica: 🍅89% - 🍿90% - IMDb 7.8
Compañías: Metro-Goldwyn-Mayer (MGM)
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